La playa
La playa es mi sitio favorito para disfrutar el verano. Es genial, hay agua para poder refrescarse, da mucho el sol y también corre la brisa que hace que los días calurosos no lo sean tanto.
Cuando voy a la playa me encanta hacer deporte: me gusta jugar al balón, nadar en el mar, jugar a las palas o practicar el pino.
También me gusta ir a la playa a relajarme, a comer y a pasar el día con mis amigos.
Sin duda la playa es lo que más me gusta.
El impostor
Arribar altra vegada a un lloc conegut, camins estrets de terra plens de romaní i molts arbres forts i robustos.
M’agrada molt caminar per la muntanya mirant el roig de la terra, el color variat de les flors, herbes per tot arreu i eixa oloreta de pins…
M.M.
La cuestión
¿Playa o montaña?
La eterna cuestión, creo que ambas tienen muchas cosas que ofrecer desde olas hasta aire puro.
Si tuviera que elegir sería un sitio de montaña en el que cerca hubiera una playa, pero una playa de rocas y desierta para poder disfrutar sin que nadie me moleste.
KVR
Oasis
En verano, después de un largo día de calor llegar a la playa es como cuando estás en el desierto y te encuentras un osasis.
Vega
Cima
Lo mejor de la montaña es poder subir a la cima y contemplar las vistas, en ese momento te das cuenta que las pequeñas cosas son los mejores placeres de la vida.
MRRH
Las montañas
Prefiero la montaña al mar por diferentes razones.
En la montaña, el número de personas es más bajo en comparación con el del mar.
Prefiero el silencio y el aire de la montaña, que la arena y la marea humana.
En las montañas, la gente es más amable y te saluda cuando te cruzas con ellos, puedes cruzarte con animales en su medio natural disfrutando de hermosos paisajes.
Thomas
AQUELL BOSC MEDITERRANI
No he estat mai ací, però val la pena. A cop d’ull, sembla un frondós bosc mediterrani qualsevol, molt paregut als nombrosos boscams que hi ha a la meua terra. Però, a poc a poc vas apreciant més els detalls. Una flor groguenca que no has olorat mai, una brisa càlida que anuncia la fi de la primavera o per exemple, unes sendes interminables en les quals t’imagines passejant amb els teus. Tot forma part d’un microcosmos on ningú pot sentir res paregut a l’estrès. En passar unes hores allí, només brogeix pau dels teus porus, tranquil·litat i potser també ganes de viure. El que tinc ben clar és que és el lloc ideal per tal d’abstraure’t i deixar la vida en repòs. El temps, allí, s’atura.
Cecilia Núñez Camarena